NADA SOBREVIVE SIN AUDIENCIA.

Annabelle Viñas
COM-348
Prof. Mercedes Muñoz



25 de Enero de 2010


Cuando se menciona la palabra “medios” o “medios de comunicación” nos viene a la cabeza un sinfín de objetos tanto electrónicos como de cualquier otra índole, radio, televisión, prensa, entre otros tantos, utilizados por el hombre para hacer llegar información de un lugar a otro, como también para comunicarse con las demás personas y contribuir en la formación de opiniones por parte de los receptores. Sin embargo, existe una discrepancia por la definición cambiante de lo que es la audiencia y de su verdadero papel frente a los medios. Un factor importante de esto es conocer exactamente hacia dónde va dirigido el contenido de los medios de comunicación y si el mensaje es asimilado por la audiencia.


Conocemos como audiencia al público que recibe mensajes a través de un medio de comunicación, habitualmente televisión o radio, no obstante, no existe nada en esta definición que nos haga saber la importancia de la audiencia para una campaña publicitaria y de la segmentación o clasificación de esta. Lo primero que se debe tomar en cuenta es que una audiencia es un conjunto de personas con necesidades e intereses similares, heterogénea. Anteriormente se consideraba a la audiencia como víctima de los medios de comunicación masivos, sin embargo esto ha ido cambiando con el tiempo y se ha aclarado que los receptores son más activos, perciben selectivamente y manejan la comunicación que reciben de los medios. Cuando una empresa lanza un anuncio publicitario es porque espera una respuesta de un público determinado y el mensaje tiene éxito si capta la atención del receptor. Este es el resultado de que miles de marcas alrededor del mundo aun existen y se mantienen en el mercado, por la respuesta que estas tienen en las necesidades y deseos de un tipo de consumidores. El receptor del mensaje empleado en la campaña es la clave de la eficacia.
Por otra parte, cabe destacar que muchas veces las comunicaciones genéricas intentan llegar a todos, pero solo llegan a unos pocos. En parte esto se debe a la segmentación de la audiencia y al mensaje transmitido, ya que la información o el mismo producto que se coloca en el anuncio publicitario no siempre es lo que comunicamos, el verdadero mensaje que comunicamos es lo que el receptor o consumidor entiende. Es por esto que se le deben dar datos necesarios, para que el receptor forme el mensaje en su mente. En cuanto a la segmentación de la audiencia, estas varían, pueden ser geográficas, que apunta a la división de un país en sus zonas cardinales, el área rural y urbana; demográfica, atiende el número de habitantes, sexo, edad, nacionalidad y religión; y la socioeconómica, comprende el nivel económico, profesión, educación, entre otras. Cada anuncio publicitario debe tomar en cuenta la segmentación de la población, haciendo un estudio de mercado para poder entonces lanzar su producto para un tipo de audiencia.
La opinión de la audiencia se ve afectada por los medios de manera directa, sin embargo, el receptor se ha convertido en más selectivo en cuanto a esto, ya que este elige que escuchar, ver o leer. No obstante, los medios no dejan de influir en las personas solo por estas ser selectivas, es decir, más que entretener a la audiencia, sacándola de la cotidianeidad, la educa, la pone al tanto de lo que pasa con noticias y diversas informaciones, que a la vez hace de la audiencia entes pensantes.

Para finalizar, podemos decir que aunque la audiencia parezca no obtener un papel fundamental cuando hablamos de medios, es esta la que establece las preferencias de la programación, la que maneja la información como le plazca, sin ella no habría eficacia en la comunicación, y mucho menos existirían medios de comunicación, ya que nada sobrevive sin audiencia.